“Doctor, no sé lo que me está pasando. ¿Alguna vez volveré a sentirme como yo misma?”, dijo Claudia (nombre ficticio) llorosa a su doctor.

Cuando pasamos por circunstancias difíciles, ya sean situaciones familiares, laborales o de salud, es comprensible que nuestro ánimo decaiga, pero y qué de cuando todo está bien y aun así nos sentimos tristes, ansiosas o intolerantes.

La mujer puede pasar por muchos cambios emocionales en el transcurso de su vida. Algunos, ocasionados por las situaciones que enfrenta, pero otros pueden deberse a cambios fisiológicos.

Cuando esto sucede, tenemos que explorar los cambios por los que está atravesando nuestro cuerpo. Los cambios cíclicos del estrógeno, la progesterona y otras hormonas afectan directamente los neurotransmisores del cerebro que trabajan con nuestro estado anímico. Por lo que, la desestabilización hormonal no solo producirá cambios a nivel fisiológico, sino también a nivel emocional. Durante estos cambios, podemos experimentar muchas emociones desagradables y, sin querer, tener actitudes que afecten las relaciones interpersonales. 

¿Qué podemos hacer?

1. Ve a la raíz. Ciertamente, no saber qué nos sucede o qué ocasiona que nos sintamos deprimidas o inestables emocionalmente puede ser frustrante. Por lo que vamos a evaluarnos de forma integral para descubrir la raíz de nuestra condición emocional.

• Solicítale a tu médico de cabecera realizar pruebas generales, que incluyan exámenes de la tiroides.

• Solicítale a tu ginecólogo un examen hormonal completo.

• Si tus resultados salen desbalanceados, trabaja con el tratamiento asignado para que puedas regularte.

• Si tus exámenes físicos salen bien, entonces considera buscar ayuda profesional para evaluar otras posibilidades. Recuerda, no tenemos por qué sufrir solas lo que podemos superar acompañadas.

2. No tomes decisiones en este periodo. Hay personas que durante periodos de inestabilidad emocional toman decisiones radicales, como lo es divorciarse o renunciar a sus trabajos. Luego que se estabilizan se dan cuenta de todos los errores que cometieron y resienten lo que han perdido. Tristemente, esto podría provocar que el estado anímico vuelva a deteriorarse. Por lo que es sumamente importante que hagamos el hábito de no tomar decisiones radicales cuando nos sentimos inestables emocionalmente. Puedes pedir tiempo tanto en el trabajo como en tus relaciones, pero preséntalo como algo temporero.

3. Comparte tu situación con las personas pertinentes. Es importante que compartas con tus familiares, jefes o personas claves en tu vida lo que te está sucediendo para que juntos puedan identificar las maneras de poder manejar las cosas en lo que tu cuerpo se estabiliza.

 

4. Cuida tu salud integral. Cuidar nuestra alma y espíritu es tan importante como cuidar nuestro cuerpo, por lo que es necesario que desarrollemos hábitos que logren contribuir a nutrirlos. Cada día separa un tiempo para ir a caminar y mientras lo haces, pon atención a lo que ves y escuchas, permite que tus pensamientos y emociones se asienten.

Toma el control de ti, querida mujer, poniendo en práctica estas recomendaciones y verás que a pesar de todos los cambios que puedas atravesar, estarás bien.

Por Christy Muller Monrouzeau / Para Primera Hora

La autora es comunicadora y autora del Bestseller “Una vida mejor”