Con lluvia de papelitos en forma de mariposas, Jenni Rivera fue despedida hoy con banda en una emotiva ceremonia en el Anfiteatro Gibson, como lo pidió en una de sus canciones, y con asistencia de sus familiares, amigos y miles de admiradores.

Momentos emotivos tuvo el evento de dos horas que contó con el féretro cerrado con los restos de la “Diva de la banda” y que tuvo un servicio cristiano que fue denominado por los familiares de la cantante como “ceremonia de graduacion celestial”.

Al evento, para el cual se repartieron seis mil boletos previamente, en un apartado entre el público aparecieron conmovidos y consternados Marco Antonio Solis, Olga Tañón, Kate del Castillo, Edward James Olmos, Angélica Vale y Larry Hernández, entre otros.

Los papelitos en forma de mariposas reforzaron mucho de la analogía que Rivera, quien nació en Long Beach hace 43 años, empleaba en su carrera artística, en donde empezó como “La mariposa de la banda”, antes de ser la “Diva de la banda”.

La vendedora de más de 15 millones de álbumes, comparaba su carrera con la de una oruga que anduvo arrastrándose en el suelo y que terminó transformada y multicolor.

Uno de los momentos emotivos los protagonizó su hijo Michael, cuando éste pidió 27 segundos de silencio en honor a los 27 fallecidos en Connecticut y en donde muchos de esos niños no pudieron ser disfrutados por sus padres, “como sí lo pudo hacer nuestra madre”, expresó.

Y no se diga su hijo Johnny, de 11 años, quien hace poco perdió a su padre y ahora a su madre y cuando habló provocó que los asistentes derramaran lágrimas.

Desde el inicio, la familia le rindió tributo a Jenni, todos vestidos de blanco con excepción de su madre Rosa Saveedra, quien portó un vestido rojo, el tono favorito de la cantante de éxitos como Inolvidable, A cambio de qué, Ya lo sé y Basta ya.

Otro momento estremecedor ocurrió con su hermano Lupillo Rivera, quien no pudo cantarle el tema de Te extranaré y que grabó previamente, lo que fue reforzado con fotos familiares que lo destrozaron y derramó lágrimas al tiempo que éste se escuchaba.

Desde el inicio de la ceremonia se presentaron imágenes de cómo abría sus conciertos la que ha sido considerada la máxima vendedora de música regional mexicana en Estados Unidos, un segmento por siempre dominada por cantantes masculinos.

Llegaron al escenario para rendir homenaje a la Gran señora, Ana Gabriel, Joan Sebastian, Olga Tañón y el señor Pedro Rivera, padre de la cantante, éste último con el corrido de Jenni Rivera que él mismo compuso.

Entre los oradores, el programador Pepe Garza reconoció que el gran éxito de Jenni, lo basó en que fue auténtica. “Sus metidas de pata con la que nos hizo saber que era imperfecta mostró que podía triunfar cada día más”.

En la ceremonia, hablaron sus hermanos Juan, Gustavo, Pedro jr., Rosy, sus padres Pedro y Rosa y sus hijos Jeannie “la chiquis”; Jaquie, Johnny y Michael.

Al término, se efectuó la ceremonia privada con los familiares y amigos cercanos y se esperaba que su sepelio se llevaría a cabo más tarde y también en privado en el cementerio All souls de Long Beach.